El negocio de la protesta

Ayer fuimos testigos de la decimocuarta marcha/protesta/manifestación en la Calle de La Fortaleza (aunque la izquierda la quiera llamar calle Resistencia) en la que, aún con los más generosos tiros fotográficos, resultó evidente que se trataba del decimocuarto fracaso consecutivo.

Y sí, tenemos ante nosotros a un grupo bastante reducido de puertorriqueños (con uno que otro extranjero reforzando las ideas socialistas y comunistas) que, en lugar de ir a la Placita en Santurce o al Distrito T-Mobile a “janguear” como la mayoría en el área metropolitana, prefiere hacerlo frente a los guardias en la Calle de La Fortaleza. No es ni más, ni menos que eso; un “jangueo”.

Sin embargo, hay unos elementos que en los medios tradicionales de noticias y entretenimiento NO les van a analizar, y que me parece importante que discutamos en lo que yo llamo “hacer el mapa”.

Vamos por parte.

Para empezar, siempre que tenemos uno de estos “jangueos” con los estribillos de FUERA LUMA, FUERA PIERLUISI, LUCHA Sí y ENTREGA NO, el sistema es el mismo:

Paso 1: Sin revelar el autor, preparan un par de promociones con banderas negras “de Puerto Rico”, invitando a la gente a participar porque “el pueblo se cansó”.

Paso 2: Un par de comunicadores lo comparten por las redes haciéndose los sorprendidos, como si no supieran de dónde salió, y le ponen algo así como: “las redes hablan”.

Paso 3: Sale padre Pedro Ortiz con algún comunicado plagado de errores ortográficos y contradicciones, no solo políticas sino religiosas, uniéndose a la “espontánea” convocatoria.

Paso 4: Artistas como Residente, Kanny García, Ricky Martin, PJ Sin Suela y Bad Bunny retuitean las invitaciones “espontáneas” y lanzan uno que otro videíto invitando al pueblo a manifestarse, mientras ellos viajan por la nación y el resto del mundo sin botar una sola gota de sudor.

Al final, van los mismos 4 gatos a la manifestación, los principales promotores de la protesta se ausentan y los artistas se preparan para hacer otra convocatoria “espontánea” para una fecha futura.

Ahora bien, pregúntense por qué continúan todos estos personajes haciendo el ridículo y, peor aún, repitiendo que “podríamos tener otro verano del 2019”, porque sí, porque ellos lo dicen. Bueno, con esto último, me permito hacer la segunda parte del mapa.

¿Ustedes recuerdan aquella escena en Lion King, cuando Simba intenta espantar a las hienas con un rugido y se escucha uno súper fuerte, que deja a las hienas embarradas del miedo, pero que resulta que el rugido no era de Simba, sino de Mufasa, que estaba detrás de él? Pues algo así pasó aquí.

En el verano de 2019 (sin entrar en mucho detalle porque eso merece otra columna) los artistas gritaron, los deportistas gritaron y los izquierdistas gritaron igual que Simba. Se escuchó un rugido enorme que terminó con la gobernación de Ricardo Rosselló, y ellos, al igual que Simba, se creyeron el cuento de que el rugido era de ellos, cuando en realidad era de los penepés que se le tiraron en contra al entonces gobernador.

Por lo menos Simba, en cuestión de segundos, se dio cuenta de que el rugido era de Mufasa y no de él. Sin embargo, los artistas, deportistas e izquierdistas todavía creen que el rugido fue de ellos cuando, en realidad, si no fuera por el golpe que los propios líderes del PNP (no todos, pero la mayoría) le dieron a Ricardo Rosselló, este todavía sería nuestro gobernador.

Así las cosas, estos personajes viven envalentonados, creyéndose que ellos tienen poder de convocatoria, poder para poner y quitar gobernantes, y que basta con un mensaje por Twitter o Facebook para controlar lo que pasa en Puerto Rico. El problema que tienen, pero parece que no lo entienden o no les importa, es que la mayoría, sí, la inmensa mayoría de los puertorriqueños piensa totalmente distinto a ellos.

Tal vez, no sé, esto se les traduce en LIKES o SHARES en las redes sociales, y con eso son felices. A lo mejor tienen algún pacto o juego entre ellos, y que los demás desconocemos, donde miden quién logra más atención con una pendejada.

Mi teoría es la siguiente:

Entre los 3 partidos independentistas obtuvieron más de 200,000 votos en las pasadas elecciones. El Choliseo tiene una capacidad para 18,500 personas. Con que convenzan a 2 de cada 10 izquierdistas de que “se adelanta la independencia o se aguanta la Estadidad, apoyando a estos artistas”, tienen para un par de funciones lleno total.

Así las cosas, resulta un negocio muy lucrativo atacar al PNP y la Estadidad si, total, viven en uno de los 50 estados y lo que aquí pase no les afecta.

Bendecidos.